La primera vez que oí hablar de Swamp Dogg fue a través de Doris Duke y su increíble “I'm a looser” de 1969, para mi uno de los discos de Soul más emotivos de todos los tiempos. Doris Duke se vacía, y alcanza cotas de sentimiento que no dejan indiferente a nadie con un mínimo gusto por la música Soul y Rhythm and Blues. “I'm a looser” no hubiera sido lo mismo sin el toque mágico de Swamp Dogg, quién produce y aporta la mayoría de las composiciones del disco, con un sonido conducido por una sólida sección rítmica formada por los mejores músicos de Muscle Shoals, mezclado con unos delicados arreglos de cuerdas y emocionantes orquestaciones a cargo de su inseparable colega Richard Rome desde los días de Calla records, pero siempre manteniendo el carácter directo y sincero del mejor Soul del sur profundo de los Estados Unidos.
Los inicios de la carrera de Mr. Swamp Dogg, se remontan a finales de los 50 como fiel imitador de Little Richard, bajo el nombre de Little Jerry, y en los 60 obtuvo algún éxito moderado, como la brillante “Baby you're my everything” de 1966. Poco a poco se fue haciendo con una reputación gracias a su incuestionable talento como cantante y compositor. Tras estar en múltiples independientes como Loma, Calla, es en esta época, mediados de los 60, cuando Swamp compagina su carrera en solitario con labores de producción y composición para otra gente. El ritmo de producciones ajenas es impresionante, tanto por la variedad de discográficas para las que trabaja como por su calidad. Entre 1967 y finales de los 70 todo lo que toca este hombre lo convierte en oro, ya no en el aspecto comercial y empresarial, hablamos de auténticas gemas. Swamp Dogg es capaz de crear un clásico tras otro.
Durante 1967 y 1968 trabaja para Musicor (y su subsidiaria Rhythm and Blues Dynamo). Destacan tremendos pelotazos para los hermanos Inez & Charlie Foxx, con el clásico “(1,2,3,4,5,6,7) Count the Days” que sube a las listas de éxitos, el ex Flamingos Tommy Hunt, Gene Pitney desquitándose de su papel de baladista habitual para interpretar un explosivo “She’s a heartbreaker” lleno de vientos que haría palidecer a los mismísimos Mitch Ryder and the Detroit Wheels, que también consigue escalar las listas de éxitos. La calidad de Swamp Dogg como solista queda demostrada con “Run run roadrunner”, un clásico inmediato que por alguna oscura razón pasa totalmente desapercibida para el público.
Fuera de Dynamo, en 1968 tiene un breve encuentro con una pequeña independiente de Nueva York de nombre Botanic records. Únicamente graba 3 resplandecientes singles con temas de Little Charles and the Sidewinders, o el mismo Jerry Williams (Swamp Dogg) aporta una estupenda “Ship wrecked” que suena a clásico inmortal. En este período comienzan las fructíferas colaboraciones, pero sin apenas repercusión mediática, con el grandísimo Gary US Bonds. Juntos componen “I’m glad you’re back” que muestra a Bonds como lo que es, un tremendo vocalista lleno de emotividad.
En 1969 Swamp Dogg firma como A&R de Cotillion (subsidiaria rhythm and blues de la poderosa Atlantic) durante un corto período de tiempo. La figura de A&R (Artists and Repertoire) es una figura clave en la maquinaria de una discográfica, ejerce de cazatalentos, localiza productores, compositores, músicos, etc... está claro que Dogg es la persona adecuada para este cargo, conoce perfectamente el negocio musical, pero en esta época Jerry Wexler (socio de Atlantic) y compañía se vuelcan más en el mercado Pop rock blanco (Eric Clapton, Led Zeppelín, Yes, Stephen Stills...) y dejan el Rhythm and Blues más de lado, a pesar que gente como Wilson Picket o Aretha Franklin tienen gran éxito comercial. Pero no importa, el paso de Dogg por Cotillion no tiene tacha, trabaja con nombres legendarios como Drifters, Patti La Belle & the Blue Belles, C & the Shells, con resultados monstruosamente buenos, pero de nuevo sin ningún tipo de repercusión.
Swamp Dogg, insensible al desánimo, continúa su andadura hacia las alturas de la mejor música Soul, y en 1969, tras la salida de Cotillion inicia su periplo musical sureño trabajando para sellos como Canyon records y Mankind, dicho período va del 69 al 72, y básicamente el centro de grabación son los estudios de Muscle Shoals, en Alabama, no es la primera ni la última vez que hablaré de estos estudios de grabación que huelen historia de la música, tan legendarios como todos los huéspedes que los han habitado en uno o en otro momento, o como los músicos de la casa que formaron la Muscle Shoals Rhythm Section. En este período Swamp Dogg colabora con Kenny Carter, el super grupo Slick ‘n’ the Family Brick compuesto por el propio Dogg, Kenny Carter y Gary US Bonds, otros intérpretes son ZZ Hill y Obe Jessie, pero sobre todo destaca las colaboraciones con la inconmensurable Doris Duke. Esta dama del Soul es una consumada cantante que en el pasado colaboró en grabaciones de “grandes” como James Brown o Aretha Franklin, también fue una habitual del teatro Apollo de Harlem haciendo coros para todo el mundo que actuara en el mítico teatro neoyorkino. Sus colaboraciones con Swamp Dogg son imprescindibles, juntos grabaron un par de discos y algún single, y para expertos musicales como Dave Godin, su disco de 1969 “I’m a loser” es su favorito de todos los tiempos, y no es de extrañar.
Una vez finalizada su aventura sureña, en 1973 Swamp Dogg se mueve a discográficas independientes como Fungus o President, entre otras. Compone y produce a enormes vocalistas como Arthur Conley, con un increíble “Complication #4” que demuestra que este hombre va mucho más allá de “Sweet Soul Music”, también recupera a Ruth Brown, reina del Soul y rhythm and blues allá por los años 40 y 50 cuando grabó para Atlantic, e incluso con Eleanor Grant hace alguna incursión en la música disco con resultados, como no podía ser de otra forma, de lo más brillantes.
... y hasta aquí llega este artículo, pero la trayectoria artística y musical de Swamp Dogg llega hasta el siglo XXI, a día de hoy este hombre sigue grabando estupendos discos y girando por USA y Europa. Con cerca de 70 tacos una persona está en disposición de sentarse y disfrutar de un buen vino o una buena lectura, pero nuestro protagonista no, Swamp Dogg siempre ha sido un culo inquieto y temo que a estas alturas del partido siga así hasta que el cuerpo aguante. Por lo visto, su último proyecto es la publicación un nuevo álbum de los Manhattans, un grupo de Rhythm and Blues vocal en activo desde los 60.
Actualmente el imprescindible sello ACE records, está reeditando parte del fondo de catálogo y las producciones de Swamp Dogg de los dispersos sellos para los que trabajó, destacando el recopilatorio CD “Blame it on the Dogg” de cuyo libreto interior me he basado para hacer este artículo.
La maravillosa "What's so wrong with you loving me" por Kenny Carter inédita hasta el 2008
Doris Duke interpretando "Bad water" original de la única e irrepetible Jackie DeShannon
"Redneck" del propio Swamp Dogg incluída en su excelente disco de 1970 "Total destruction to your mind"
Ole ole ole ese bepo bueno.
ResponderEliminarsí señor, cada vez le tienes mas pillao el estilo al blog, y acompañar la lectura con la música de la que hablas ... mola mucho más !
Jero, me alegro que te guste la musiquita. Ya sabes, un poco de música es buena para el alma (y nunca mejor dicho).
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