

En cuanto a su música, Muddy Waters sonaba elegante, desprendía clase en cada nota y estrofa que cantaba, y era, por así decirlo, más comedido y moderado en sus formas. En cambio Howlin' Wolf era como una olla a presión a punto de explotar, su estilo era sudoroso, sexual y violento, tan imponente como sus casi dos metros de estatura y 130 kilos de peso, pero por encima destacaba su aplastante voz gutural, áspera como una lija, llena d
e misterio y emoción al mismo tiempo. Pero empecemos desde el principio, Howlin' Wolf nació como Chester Arthur Burnette en 1910 en West Point, Mississippi. Desde muy joven le llaman Howlin' Wolf por el viejo cuento de Caperucita Roja y el lobo que le contaba su abuelo. Sin tiempo para ir a la escuela, el joven Wolf trabaja las áridas plantaciones a muy temprana edad, pero al poco tiempo se niega a hacerlo y provoca las iras de su madre, de estricta moral religiosa, y le echa de casa. Sin un lugar a donde ir, Wolf se traslada a casa de su tío, pero la cosa no mejora, es maltratado continuamente hasta que un día abandona el nuevo hogar; camina más de 70 millas hasta llegar a casa de su padre donde al fin encuentra cierta tranquilidad. La figura paterna tendrá gran importancia en el joven Wolf, entre otras cosas, cuando cumple 18 años le regala su primera guitarra.






Paralelamente, Sam Philips en esta época, antes de fundar su propio sello Sun Records, además de trabajar con los hermanos Bihari, también lo hace con los hermanos Chess de Chicago, que tenían un sello discográfico llamado Aristocrat, al que rebautizan Chess Records. Esto hace que Sam Philips ofrezca las grabaciones de Wolf a las dos discográficas, tanto a RPM como a Chess, esto desemboca en litigios judiciales entre los dos sellos por los derechos de autor de Wolf. Finalmente, tras duras negociaciones, Wolf es cedido a la Chess en 1953, hecho que pone fin a la primera etapa de nuestro hombre, que es la desarrollada en Memphis junto a Sam Philips y Ike
Turner, y según el propio Philips hablando de Wolf, es el autor más excitante con el que trabajaría, y para su desgracia ve como abandona Memphis para trasladarse al Down South de Chicago, donde los hermanos Chess tienen su propio estudio de grabación en el legendario número 2020 de la Avenida South Michigan. Algunos temas de este periodo son: "Ridin' in the moonlight", "How many more years", "Crying at the daybreak", "Howlin' Wolf Boogie" o "Mr. Highway man" por poner unos ejemplos. Todos ellos son escalofriantes ejercicios de Blues minimalista, algunos con apenas un par de notas que se repiten como un extraño mantra que libera el espíritu a base de electricidad, con una banda difícil de superar; se dice que en esa época, únicamente la banda de Muddy Waters (la clásica formación con Little Walter, Jimmy Rogers y Otis Spann) era la única que podía hacerle frente. Sea como fuere destaca por encima de todo la gutural y ronca voz de Howlin' Wolf, que hace de cada interpretación, una pieza única, directa e inflamable, como un pequeño incendio, siempre con la tensión de una cuerda apunto de romperse, o la vena del cuello apunto de reventar. Aún así, como se verá en la siguiente parte, lo mejor estaría aún por llegar.

"Howlin' Wolf Boogie" de 1951, siempre adelantado a su tiempo