martes, 17 de febrero de 2009

Beau Brummels

Retrocedemos a 1964, los Beatles están en su momento más dulce, triunfan en todo el mundo e invaden las listas de éxitos americanas, y en poco tiempo la “Beatlemanía” se extiende como una contagiosa enfermedad. Consecuencia: surgen en el país un montón de bandas influidas por los Beatles como Byrds, Turtles, Monkees y muchas más.

Los Beau Brummels fueron otra de estas bandas que crecieron bajo la alargada sombra de los Beatles en la zona de San Francisco, algún año antes de que la población se rindiera ante el "poder de las flores", y el movimiento Hippie surgiera con vocación para cambiar el mundo. Pero los Brummels no fueron otra banda más, eran especiales, y sobre todo fueron de los primeros en recoger el testigo del Pop anglófilo en Estados Unidos, y también fueron precursores del sonido de la Costa Oeste influyendo en muchos otros grupos que surgirían a los pocos años.

Los primeros singles de los Brummels como “Laugh, laugh” o “Just a little” estaban muy influidos por el Merseybeat importado de Inglaterra, y aunque en 1965 esas canciones coparon las listas de éxitos americanas, algunos críticos les calalogaron injustamente de mera copia de los Beatles. Los Beau Brummels del 65 eran una banda de cinco dotados músicos que combinaban el Pop británico de la época, con sus raíces americanas canalizadas a través de estilos como Rhythm and Blues, Country o Folk. Sal Valentino poseía una voz llena de sensibilidad, a la altura de los más grandes cantantes, que se acoplaba perfectamente a los preciosos juegos de voces del resto de los componentes.

Pero sobre todo, lo que permanece son las composiciones propias del grupo, en su mayoría del guitarrista Ron Elliott. Fantásticas canciones de menos de tres minutos que el tiempo ha tratado con mimo gracias a su espontaneidad, optimismo y esa fuerza que produce un extraño cosquilleo de bienestar para los sentidos. Auténtica “música para los buenos momentos” nacida para ser disfrutada, y basada en los básicos acordes del Rock and Roll con unas melodías que cortan la respiración.

Los Beau Brummels son responsables de una discografía admirable. Salvo algún desliz, todo lo que grabaron, entre 1964 y 1968, es de una calidad abrumadora, y muestra a un grupo en permanente movimiento y evolución, pero sin perder nunca su estilo particular, ni tampoco ese don para elaborar maravillosas canciones artesanales que rozan la perfección.

En 1965 publicaron “Introducing the Beau Brummels” y “Volumen. 2” en la independiente Autum Records, dos discos sobresalientes de sabor británico. Hay ecos de Beatles, Searchers y Hollies, pero también las ricas raíces de la música popular americana están presentes. Casi todos los temas son composiciones propias y la producción corre a cargo de Sly Stewart, músico de sesión y líder de los increíbles Sly and the Family Stone, cuya labor es ni más ni menos que enaltecer tan tremendo material sacando afuera lo mejor que lleva el grupo: sonido directo, simple y al mismo tiempo elaborados, y nada sobrecargados arreglos. Estos dos LP’s son mis preferidos, y si os gusta el sonido de los 60 y las buenas melodías no los deberíais dejar pasar.

En 1966 Autum Records es absorbida por la Warner Bros. y su primer trabajo para la gran compañía es “Beau Brummels 66”. Se trata de un disco de correctas versiones de la época, que no va más allá de lo anecdótico. Se nota que se ha grabado con prisas entre los escasos huecos libres que tiene el grupo en sus extenuantes giras. Sin duda estos chicos lo podían hacer mucho mejor, y desde luego que así fue. En 1967 y 1968 grabaron “Triangle” y “Bradley’s Barn” respectivamente, dos trabajos con mayúsculas, inundados de sus habituales melodías y preciosos juegos de voces, con elementos de Folk, una pizca de Sicodelia y bastante Country, sobre todo presente en “Bradeley’s Barn”. En definitiva, dos discos que con el tiempo se han convertido en piezas claves del sonido “Costa Oeste” y constituyen un crisol de músicas con todos sus matices, colores y sensaciones. Simplemente la magia hecha música.

"Gentley wandering ways", precursores del Country-Rock


"Fine with me" y sus deliciosos juegos de voces


"In good time", con un sonido más cercano al Garage

5 comentarios:

  1. Y para cuándo un artículo sobre los Burning.

    Soy el Pacorro. Como ya imaginarás.

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  2. Aqui me has pillado con el gayumbo bajado. Solo los conocía de oídas. Intentaré subsanarlo, los temas que has incluido son cojonudos.

    ThX PePo!

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  3. ¡Que pasa Paco, hermano!, algún día dedicaremos un articulillo a la banda de Johnny y compañía.

    Rober, es un grupo increíble, últimamente no paro de escucharlos. Los dos primeros discos están editados por Sundazed y Repertoire con abundante material extra. "Triangle" y "Bradley's Barn" también están disponibles y se pueden encontrar con facilidad en nuestra querida tienda de discos "Radio City".

    saludos

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  4. Lo cierto es que no controlo mucho a los Beau Brummels, salvo su buenísimo primer disco y uno de título homónimo que tiene una de las portadas más feas de esa parte de los setenta (y ya es decir). Debe ser la razón por la cual es poco valorado, porque para mí es ponerme "You Tell Me Why" y me traslado a un estado de bienestar solo conseguido mientras tomo un Nesquik veraniego.

    Un abrazo.

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  5. 61 y 49, desde las tierras del Garage, como muy bien dices, eso es lo bueno de la música, te traslada a otros estados de conciencia sin ningún tipo de alteración artificial, simplemente unos acordes desnudos que lo dicen todo. Sinceramente, me parece una de los milagros más alucinantes. "You tell me why" también me gusta mucho.

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